En la primera visita le tomaremos un historial completo, seguido de unas pruebas quiroprácticas específicas para establecer el estado en el que se encuentra, utilizando instrumentación quiropráctica para localizar las subluxaciones vertebrales y determinar si le podemos ayudar.
En caso de faltar información es probable que se requieran pruebas adicionales.
De este modo, en caso de por ayudarle, podremos ofrecerle un servicio específico con un plan quiropráctico que se ajuste a sus necesidades mediante un número adecuado de visitas personalmente recomendado para su caso.